El mundo está en alerta por el brote de gripe porcina que afecta a diversos países.
Los expertos afirman que el virus que ha causado la epidemia que se originó en México puede seguir mutando y convertirse en una pandemia.
No debemos olvidar, sin embargo, que cada año millones de personas en el mundo se contagian de gripe. No de una gripe porcina sino de la gripe común que circula en invierno en las comunidades.
Esta enfermedad -que se propaga en las llamadas epidemias estacionales- es a menudo un grave problema de salud ya que puede llegar a matar a entre 250.000 y 500.000 personas cada año en el mundo.
"Que muera gente en un episodio de gripe, sea porcina, aviar o estacional no debe ser de extrañar", le dijo a BBC Ciencia el doctor Amadeo Esposto, Jefe de Infectología del Hospital San Martín de Argentina.
"Porque todas las gripes producen mortalidad en los grupos susceptibles. Lo que preocupa ahora es que la enfermedad nos encuentra a todos sin experiencia previa con este virus, por lo tanto todos somos susceptibles de poder padecer la enfermedad".
"Pero también puede ser que esta epidemia se manifieste como otras tantas epidemias gripales, con una mortalidad esperable", señala el experto.
Sin neutralizarlo
Hasta ahora, más de 2.000 años después de que fueran identificados los síntomas de la enfermedad, la ciencia no ha logrado encontrar la forma de "domar" al virus que la causa.
Si el sistema inmune se enfrenta a una cepa particular del virus a la que se ha enfrentado en el pasado, es probable que tenga alguna inmunidad.
Pero si los antígenos del virus son nuevos para el sistema inmune, éste se verá debilitado y tendrá pocas defensas contra el nuevo invasor.
"Sabemos que es un virus que todos los años cambia y por lo tanto la vacuna de un año no sirve para el otro", le dijo a BBC Ciencia el doctor Amadeo Esposto.
"Son virus que van pasando por seres intermedios, como cerdos, aves y humanos, y en ese pasaje hay una mezcla de elementos que hace que aparezca siempre una variante nueva", agrega.
"Son patógenos con una ubicuidad extraordinaria y toda la ciencia está volcada justamente a tratar de encontrar una respuesta".
En efecto, los virus de influenza son muy hábiles y por eso la humanidad no ha logrado domarlos.
Aunque no se sabe con certeza cómo se originó el nuevo virus en México, se piensa que pudo haber sido en los cerdos, un excelente "crisol" para mezclar y combinar su material genético.
Cuando surge una nueva cepa de virus y ésta adquiere la capacidad de propagarse de una persona a otra las autoridades de salud deben monitorearla muy de cerca porque tienen el potencial de desatar una pandemia.
Pero como los humanos a menudo nos vemos expuestos a variedades de la cepa H1N1 durante las gripes estacionales, hay esperanzas de que nuestro sistema inmune haya adquirido cierto tipo de inmunidad.
Los expertos afirman, sin embargo, que el hecho de que las víctimas de la epidemia actual sean adultos jóvenes -y no los grupos normales de riesgo- revela que hay algo "fuera de lo normal".
"Esto es preocupante. Pero yo me pregunto si este grupo de jóvenes era gente que nunca se había vacunado para la gripe común y quizás los grupos de riesgo que no han muerto es porque la vacuna común les brindó una ligera protección sobre la gripe porcina", dice el doctor Esposto.
"La información que tenemos es que no es así, que la vacuna común no protege. Pero entonces, ¿cómo explicar que muera gente que no debiera haber muerto?"
Propagación
La principal arma de estos virus de influenza es la facilidad con que logran propagarse.
Tanto en los puercos como en el ser humano, la influenza se replica en el tracto respiratorio y se transmite por medio de secreciones respiratorias.
La gente puede contagiarse tanto por la suspensión de partículas en el aire (por estornudos o tos), como por superficies contaminadas.
Y tal como señalan los expertos, ahora que la nueva variante del virus H1N1 se está propagado en la población humana, el virus puede continuar evolucionando en formas que cada vez podrán transmitirse más fácilmente entre personas y en formas que pueden ser cada vez más peligrosas.
"Siempre se ha especulado con que en cada cambio o mutación el virus de influenza aumenta su patogenicidad o agresividad, y puede ser que ocurra o no", dice el doctor Amadeo Esposto.
"Pero creo que, como ha hecho siempre la humanidad, lentamente vamos a encontrar la forma de poderlo neutralizar".
Quizás, dice el experto, la ciencia nunca logrará combatirlo o destruirlo pero seguirá buscando formas de enfrentarlo.
"Esto es una lucha de supervivencia de especies", afirma Amadeo Esposto. "El virus necesita células humanas para reproducirse y por lo tanto seguirá buscando todas las maneras de poder subsistir".
"Y nosotros seguiremos tratando de defendernos, ya sea con anticuerpos propios o a través de remedios o vacunas".
"Creo que ésta va a ser una lucha eterna", expresa el experto.
No comments:
Post a Comment