Gracias al impulso tecnológico y al encarecimiento del petróleo, cobra nuevamente impulso el uso de dirigibles. Estos presentan varias ventajas como un gasto mínimo de combustible comparado con los aviones, además no necesitan pistas de despegue ni de aterrizaje. Algunos modelos pueden alcanzar velocidades respetables de hasta 200 km/h y debido a su altura de vuelo no se necesita presurizar la cabina.
A pesar de la fama de inseguridad que tienen los dirigibles, ya hay iniciativas serias para su uso. Una de estas iniciativas es el Zeppelin NT el cual realizará su primer vuelo oficial sobre Londres el 10 de julio. Este vuelo será patrocinado por una marca de cerveza reconocida y posteriormente se piensa efectuar vuelos hasta la ciudad de San Francisco. Entre los avances que incluye el Zeppelin NT esta el empuje vectorial que lo hace más maniobrable, de manera que es menos vulnerable a las corrientes de aire, uno de los principales peligros para los dirigibles.
El Zeppelin NT no es la única iniciativa en este campo, durante los 90, una empresa alemana desarrolló el CL160, el cual se pensó para transportar cargas pesadas. La compañía incluso construyó unos de los hangares más grandes del mundo cerca de Berlín, sin embargo para el año 2002 la compañía se declaró en quiebra.
Por su parte la DARPA (Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados) de USA en el 2005 financió con 3.200.000 de dólares a una empresa de California llamada Aeros con el fin de desarrollar el proyecto Walrus el cual busca desarrollar un dirigible que sea más estable y manejable que los que se han construido hasta ahora. Aunque la Darpa dejo de financiar el proyecto, la Aeros sigue investigando para conseguir un diseño mas aerodinámico, con turbopropulsores, estructura de fibra de vidrio y de carbono que es mas ligera y el sistema COSH que permite despegues y aterrizajes mas rápidos empleando helio como sistemas de propulsión. Hasta ahora han desarrollado dos prototipos, el Aeros 40D, con lo último en adelantos para el sistema COSH y el Aeroscraft ML866 que cuenta con 465 m2 de cabina, capacidad de 400 toneladas para carga y una velocidad máxima de hasta 220 km/h, bastante respetable para este tipo de aeronave.
Muy similar a esta aeronave es el AirShipOne que es un híbrido entre un aeroplano y un dirigible y fue ideado por el ingeniero Gosha Galitsky. Esta diseñado con una estructura llena de helio semirígida además de alas con motores eléctricos alimentados mediante paneles solares. Puede llevar de 25 a 30 pasajeros junto con 30 toneladas de carga y viajar a 195 km/h. Puede volar como un avión y aterrizar vertical y horizontalmente. La Lockheed Martin por su parte aplica un concepto similar con su modelo P-791 que también une las ventajas del aeroplano a las del dirigible.
El dirigible Stratocruiser está más enfocado en el ocio y fue diseñado por el alemán Tino Schaedler. Este diseño incorpora un restaurante, piscina e inclusive un night club con DJ. Por su parte la compañía Skycat cuenta con un modelo que incorpora un aditamento que le permite aterrizar en el agua y en todo tipo de terrenos. La compaña espera ofrecer viajes de glamour a los pasajeros. Por otra parte el diseñador francés Jean Marie Massaud proyecta construir un dirigible de 500 metros de longitud de nombre Manned Cloud el cual sería una especia de hotel flotante con capacidad de 60 habitaciones el cual podría viajar a 280 Km/h.
Sin embargo no todo son ventajas con respecto a los dirigibles, los expertos señalan que tienen una pequeña capacidad de transporte si se compara con los aviones comerciales. Sin embargo otros argumentan que si no hubieran ocurrido desastres como el del Hindenburg, problemas como este ya hubieran sido solventados.
A pesar de esto hay quienes afirman que el desarrollo tecnológico y la escalada en precios de los combustibles harán estas aeronaves sumamente competitivas en áreas como los viajes turísticos, viajes de lujo, misiones de rescate y transporte de personas, transporte de mercaderías, publicidad, etc.
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