Se encuentra listo en NanoSail-D, una 'vela solar' que probará la habilidad de la NASA para su capacidad para llevar al espacio una pequeña pero frágil equipo que pueda 'navegar' a través del espacio.
El equipo captura constantemente partículas del sol, llamadas fotones, con sus gigantes velas de un material ligero. La acumulación de estas partículas ofrecerá la suficiente energía para que la pequeña nave realice su viaje.
Muchos científicos creen que las velas solares tienen un enorme potencial, puesto que toman ventaja de la luz solar y no necesitan de ningún químico que les de energía para propulsarse.
Menos traslado de energéticos hacen que el lanzamiento tenga un menor costo y menos retos logísticos.
Se trata de unas velas que, pese a que aceleran lentamente, podrán alcanzar una gran velocidad con el tiempo. De hecho, muchos científicos las consideran como la única forma viable de hacer viable un viaje interestelar.
El reto, sin embargo, es que tienen que ser enormes, según los científicos, pues las partículas emitidas por el Sol son tan pequeñas que las velas necesitarán interceptar tantas partículas como les sea posible.
Es ahí donde entra el proyecto NanoSail-D, que demuestra la capacidad de empacar y desplegar estas estructuras de forma eficiente. La más reciente demostración puede llevar a innovar en la forma de empacar antenas, sensores y otros equipos en la nave.
NanoSail-D será desplegada en otoño próximo, cuando sean impulsadas al espacio por un cohete Minotauro cuarto. Se trata del primer paso del proyecto hacia la implementación de las velas solares en un proyecto específico.
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