Ya son 25 años desde el desastre nuclear en Chernóbil y los efectos de esta hecatombe aún repercuten en la fauna y flora del continente europeo.
la población jabalíes que habitan en los bosques e Polonia y Alemania muestran altos niveles de radioactividad y esta sigue aumentando.
Muchos de estos animales se alimentan de trufas que se encuentran muy contaminadas porque han absorbido los residuos radioactivos del subsuelo.
El gobierno alemán ha establecido una política de pagar una cantidad de dinero a los cazadores que apresan a jabalíes radioactivos y, de acuerdo con el diario Der Spiegel, representa un grave problema de salud el en sur de Alemania:
“Muchos de los jabalíes que son cazados terminan como comida alrededor de Alemania, pero esta prohibido la venta de esta carne ya que contienen altos niveles de cesio 137, material radioactivo.
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